'Pienso en quienes conozco y en mi aprecio hacia ellos. Pienso en sus problemas, en sus necesidades, sus virtudes y debilidades.
Me detengo en cada uno de los actos que hemos vivido, yo y él..
Adelanto y retrocedo los momentos que componen las escenas de nuestros recuerdos..
Revivo en mi mente el momento y analizo mis reacciones.. Entonces me sitúo en escenarios distintos. Cambio el hilo argumental de mis recuerdos. Digo distintas frases para estas personas, para asi darles distintas máscaras de sentimientos. Observo entonces la nueva escena, vuelvo a analizar mis reacciones.
Siempre fueron las mismas, inertes e insulsas. No cambian aunque altere tanto la historia de lo transcurrido para hacerla irreconocible. No sentia compasión por sus desgracias. No sonreia con sentimiento, por sus alegrías, ni siquiera senti envidia. Mi empatía por ellos y por todos en general fue cada vez más exigua. Simplemente nunca los entendi. Inevitablemente me alejaba cada vez más de mis semejantes.
Al saber que poco a poco deje todo atrás, nunca fui capaz de distinguir si estoy ascendiendo o descendiendo. Tampoco siento nostalgia por ellos...
Si siento angustia por la llegada de la soledad.
Solo me quedo sentada anhelando, con la... humanidad que resta, que esto sea transitorio. Si no es así, tampoco me importa. Ya que cuando no sientes nada, todo da igual. Incluso vivir en desdicha, porque entonces no me reportará dolor.'
Extrañaba y no recordaba lo que era el sufrimiento.. no dura siempre la felicidad.
lunes, 31 de agosto de 2009
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